Niña vestida de Primera Comunion en campo de trigo al atardecer.

Comuniones 2020

Acabamos de comenzar el año y ya muchos me estáis preguntando si hago reportajes de Primera Comunión.

Por supuesto que sí los hago, pero me gusta decir que como todos mis reportajes, en estos también me gusta hacer algo diferente a lo que se hace habitualmente.

 

 

Ese algo diferente no es por la temática, sino porque a mí me gusta hacer las fotos sin mirar el reloj, con calma, dar el tiempo necesario que cada niña y niño necesitan.

 

 

En todos los reportajes que hago no me gusta correr, porque cada uno necesitamos de nuestro tiempo y es esencial que a quien fotografío pueda confiar en mí y  que tenga claro que cuando termine la sesión no se va a llevar a casa simplemente unas fotos, sino una experiencia muy bonita.

 

 

Aunque la sonrisa de los niños es de las cosas más bonitas que hay en el mundo, no me gusta limitarme solo a eso. Lo que pretendo es que las fotos que hagamos transmitan lo que son ellos realmente, sus miradas, sus emociones…conseguir crear un recuerdo que les dure para toda la vida.

Para conseguir eso es necesario ir despacio y que tengamos claro que vamos a pasar un buen rato. Y este planteamiento que sigo en todas los reportajes que hago, cuando se trata de fotos con niños lo cumplo a rajatabla, por esa razón no me gusta coger más de una sesión por día.

 

¿Cómo trabajo?

A todos los que me estáis preguntando os doy varias posibilidades:

  • La primera es hacer solo una sesión de fotos bien en el estudio o bien en exterior y con las fotos que haga ya tenemos para los recordatorios y el álbum.
  • La segunda opción que doy y es por la que se decantan la mayoría de los padres es por hacer una primera sesión en el estudio y de ahí se escoge una foto para los recordatorios. Y luego haremos una segunda sesión después de que haya pasado el día de la comunión en la que quedaremos una tarde después del colegio y ahí iremos todos juntos a un sitio que sea especial para vosotros.

La segunda opción es la que más me gusta,  ya que los niños están más tranquilos y son ellos mismos, ya no existe la presión de que se puedan manchar el vestido o el traje, de que se pueda hacer tarde para ir a la ceremonia…etc.  Al estar los niños más tranquilos, ellos son más naturales, se involucran al 100% en el reportaje y acabamos pasando una tarde fantástica en familia.

También muchos me preguntáis si hago las fotos el día de la ceremonia bien en la iglesia o bien en vuestra casa, sinceramente si puedo evitarlo, lo evito. Os explico el por qué, ese día los peques van a estar muy nerviosos, ya que van a ser el centro de atención de toda la gente que les quiere. En la iglesia va haber casi más cámaras y móviles que niños haciendo la Primera Comunión, las fotos que pueda hacer allí van a ser fotos bonitas porque son vuestros niños y todos sus amigos los que van a salir en ellas, pero prefiero no hacerlas porque ese día ellos ya van a estar suficientemente nerviosos por todo lo que supone la ceremonia, por leer bien, porque quede todo tal y como lo han ensayado…etc, como para que estén pendientes de salir bien en la foto.

Fotos de niña vestida con traje de Primera Comunión, en monasterio románico y en campo de trigo.

Aunque todavía no he hecho publicidad de los reportajes de comunión estoy contentísima porque ya tengo varias reservas para este año. Os lo comento para que no lo dejéis para última hora  reservar vuestro reportaje ya que otras familias pueden ocupar las fechas que os vienen bien a vosotros y luego a mi me tiene que dar tiempo a editar las fotos que vayan a ser usadas como recordatorios, al laboratorio elaborarlos y que la empresa de transporte vaya rápida en el envío. Como veis el tiempo es ajustado y es por ello por lo que si llevamos una buena planificación va a salir todo muy bien.

Y si queréis ver otro de mis reportajes de comunión pinchad en el siguiente enlace, fue el primer reportaje de comunión que hice en el 2015, espero que os guste.

https://fotovictoriadiaz.wordpress.com/2016/02/03/naia/

Un abrazo,

Vicky